A un paso de casa: pueblos bonaerenses que sorprenden

¿Quién dijo que hay que irse muy lejos para vivir una escapada inolvidable? La provincia de Buenos Aires guarda secretos que sorprenden por su belleza, su historia y su sabor. A pocos kilómetros de la gran ciudad, existen pueblos y parajes ideales para desconectar del ritmo diario, reconectar con la naturaleza y disfrutar de momentos únicos en familia o con amigos.

Tapalqué: un sabor que trasciende generaciones

En el corazón de la provincia, Tapalqué se presenta como un destino que combina tradición, tranquilidad y una irresistible propuesta gastronómica. Reconocida como la Capital Nacional de la Torta Negra, esta localidad ofrece una experiencia que va más allá de lo visual: sabores intensos, recetas heredadas y una calidez local que enamora. Sus tortas negras, que pueden alcanzar diámetros de hasta 30 centímetros, son casi un emblema del lugar, pero no es lo único para degustar.

La experiencia se completa con una visita a la cooperativa láctea «Las Totoras», donde se elaboran quesos y embutidos artesanales que se pueden probar y comprar directamente. Además, quienes buscan conectar con la tierra pueden recorrer una huerta agroecológica que ofrece visitas guiadas durante todo el año. Ideal para quienes viajan con chicos o simplemente disfrutan de lo auténtico.

Ireneo Portela: pequeño en tamaño, grande en encanto

A solo un par de horas de la Ciudad de Buenos Aires, Ireneo Portela es el típico pueblo donde el tiempo parece ir más despacio. Con apenas 500 habitantes, conserva intacto ese espíritu de comunidad y vida tranquila. Ideal para una escapada de fin de semana, este rincón del partido de Baradero invita a dejar el celular de lado y disfrutar de los pequeños placeres.

Una de sus joyas es “La sucursal de Vitto”, un restaurante de campo que abre sus puertas los fines de semana con una carta tentadora. Y para completar la experiencia, vale la pena pasar por el antiguo almacén “Goyenespe & Genoud”, que parece detenido en el tiempo y permite vivir, aunque sea por un rato, la esencia del interior bonaerense.

Manzanares: naturaleza a pasos de la ciudad

Si buscás un lugar para respirar aire puro sin alejarte demasiado, Manzanares es la respuesta. Ubicado en el partido de Pilar, a solo 67 kilómetros de la Capital, este pequeño poblado se formó alrededor de una estación de tren y hoy es un destino ideal para los que desean un día de campo sin complicaciones.

Estancias, cabalgatas, avistaje de aves y tardes de mate junto al río son parte de su propuesta. Además, conserva construcciones antiguas, iglesias y una encantadora plaza que invita a caminar sin apuro. La puesta del sol en este entorno rural es, sin dudas, una postal imperdible.

Los Toldos: historia viva y sabores que perduran

Para quienes buscan una escapada cargada de contenido cultural, Los Toldos es una excelente opción. Esta ciudad, que vio nacer a Eva Perón, ofrece la posibilidad de visitar su Casa Museo y conocer más sobre una figura clave de la historia argentina. Además, alberga una activa comunidad mapuche que comparte su arte textil y sus productos regionales.

La cita obligada para los amantes del queso es el Festival del Queso, que se celebra todos los años y reúne a productores locales con una propuesta deliciosa: desde el tradicional gouda hasta dulces, miel y cerveza artesanal. Todo acompañado de espectáculos y clases de cocina en vivo.

Una invitación a redescubrir lo cercano

La provincia de Buenos Aires está llena de tesoros escondidos que esperan ser descubiertos. Ya sea para una escapada corta o una salida de fin de semana, estos destinos ofrecen la combinación perfecta de naturaleza, cultura y sabor. ¿El mejor momento para visitarlos? Cualquier día en que quieras cambiar la rutina por algo distinto. Porque a veces, lo que necesitás está más cerca de lo que imaginás.